En el restaurante de un agroturismo en Toscana, no falta nunca la clásica botella de aceite de oliva extravirgen. Vierte lentamente el contenido sobre una simple rebanada de pan, sobre una “bruschetta al pomodoro” (rebanada de pan tostada con salsa de tomate), sobre los frijoles recién cocidos, o sobre la tradicional “ribollita”... ¡La cocina deliciosamente saludable de los abuelos!
Déjate tentar por el sabor con cuerpo y decidido del “olio nuovo” (aceite nuevo). Las “sagras” (fiestas tradicionales) diseminadas por la región en octubre y noviembre, proponen la degustación de los mejores aceites extravirgen del territorio, combinados con productos típicos locales.
¿Qué cosa diferencia el aceite toscano? La baja acidez (no superior al 0.6%). El color, desde el verde al amarillo oro. El aroma afrutado, acompañado de sabores de alcachofa, cardo, hierba apenas cortada, almendra con pizcas de sabor amargo y picante. Más aun, el producto se diferencia según la zona de cultivo y de las variedades de aceituna (“frantoio”, “moraiolo”, “leccino”, “gramignolo”, etc.). Las empresas agrícolas a veces brindan cursos para enseñar a reconocer las particularidades de cada tipo.
agroturismos de Toscana organizan visitas guiadas a los olivares y a la trituradora. Además, si reservas una estadía en otoño, puedes participar directamente a la cosecha de las aceitunas. Y al final te llevas a casa una botella de “tu aceite toscano”.