Las villas mediceas, como revela su nombre, son villas en los alrededores de Florencia (pero no solo) que fueron tiempo atrás propiedad de la familia Medici.

Se puede contar una treintena en toda la Toscana, pero aquellas más importantes desde el punto de vista histórico-arquitectónico y situadas en la provincia de Florencia, son más o menos doce: Trebbio, Cafaggiolo, Careggi, Fiesole, La Petraia, Cerreto Guidi, Poggio Imperiale, Pratolino, Lappeggi, Ambrogiana, Forte Belvedere y Mezzomonte.

Con el nacimiento del Gran Ducado en la Edad Moderna, Florencia es sí ‘capital’ de un vasto territorio, pero los señores de la Toscana y su corte, difícilmente residieron por largos periodos de tiempo en el centro de la ciudad. Y si en otros estados tomarán la forma de verdaderos palacios destinados a los soberanos y a las aristocracias que la circundan, piénsese al Escorial de Madrid (España) o a Versailles en París (Francia), que serán vastos complejos arquitectónicos- que nada tienen que ver con simples casas rurales- a ser transformadas en lugares en los cuales vivir, ocuparse de los negocios de Estado y recrearse.

He aquí el surgir, alrededor de las villas mediceas, jardines y parques enriquecidos de estatuas y laguitos, el proliferar al interior de sus salones pinturas y objetos de valor.

Para darnos cuenta de cómo estas villas se presentaron a los ojos de los visitantes, podemos dirigirnos al ex convento de los Oblatos de Florencia y admirar la serie de lunetas pintadas por van Utens. Por lo tanto, planifiquemos un breve viaje al descubrimiento de las villas de Florencia y provincia.