Hasta hace unos años atrás, lograr llegar de las vacaciones con fotos de calidad era una empresa difícil. No muchos poseían cámaras profesionales. Los más jóvenes, además, confiaban sus ‘momentos de gloria’ a aquellas pequeñas (y económicas) usa y desecha.

Hoy en día, en cambio, gracias a la llegada de las máquinas digitales y de los teléfonos de última generación… un clic está siempre a la mano, perdón, ¡al índice! Entonces, he aquí que queremos dar unos consejos a los apasionados de fotos que se encuentran leyendo estás páginas.

Si nos encontramos alojados en una de las tantas villas en colina en Florencia , para inmortalizar panoramas de ‘sindrome de Stendhal’, será suficiente asomarse a la ventana del dormitorio o ir a la terraza.

Por el contrario, si para nuestras vacaciones hemos reservado un apartamento en el centro histórico de Florencia, o nos limitamos a fotografiar Palacio Vecchio y el Duomo, Santa María Novella y Ponte Vecchio (¡y disculpen si es poco!), o decidimos subir hasta piazzale Michelangelo o a lo largo de la colina que lleva a Fiésole.

Pero los spot para realizar nuestras postales de Florencia ciertamente no terminan aquí.

Para los apasionados de sujetos floreales están el Parque delle Cascine o el Giardino dell’Iris. Para los amantes del “había una vez”, unas tomas en blanco y negro, a los artesanos mientras trabajan en sus talleres, será perfectas.

Pero sobre todo, no podemos olvidar darnos un salto por el Museo de la Historia de la Fotografía Fratelli Alinari.